Ha terminado 2017 y los datos de empleo en la ciudad de Alcorcón permiten al Gobierno municipal presidido por David Pérez ser optimista de cara a 2018. El año pasado, 1.118 personas de nuestra ciudad encontraron un empleo, la tasa de desempleo descendió un 1017% y, por primera vez en nueve años, el número de parados está por debajo de los 10.000, en concreto 9.873 personas. Además, en los últimos tres años el número de cotizantes a la Seguridad Social en nuestra ciudad ha crecido en 5.478 personas.
Hay que recordar la situación en que David Pérez encontró la ciudad cuando accedió al Gobierno en 2011. Vivíamos un contexto de crisis brutal que en España se agravó por la ineficaz gestión del Gobierno socialista de Zapatero, que primero negó la crisis y luego intentó afrontarla aumentando el gasto público y generando un déficit insostenible. En Alcorcón, a la ineficacia socialista se unía la megalomanía y la prepotencia del peor alcalde que haya tenido nuestra ciudad, Enrique Cascallana, empeñado en una obra faraónica, el Creaa, que desangró las cuentas de nuestra ciudad y la arruinó.
La deuda que Cascallana y su equipo de inútiles dejó en Alcorcón, 612 millones euros, provocó que el Ayuntamiento dejara de pagar a sus proveedores y ello fue causa de que muchas empresas de nuestra ciudad cerraran y sus empleados fueran al paro. La creación de empleo era entonces una prioridad y con ese objetivo se puso a trabajar el nuevo Gobierno de David Pérez.
Las políticas del Gobierno de la nación, que han conseguido que se recuperen siete de cada diez empleos destruidos por la crisis; más la tarea del Gobierno regional presidido por Cristina Cifuentes, que han conseguido que el paro descienda en nuestra región en un 8,7% en 2017; han sido cruciales para la evolución positiva del empleo en Alcorcón. Las políticas del Gobierno de David Pérez, principalmente a través del IMEPE, han conseguido que hoy podamos constatar que el empleo crece y que Alcorcón sale de la crisis.